Una gira de 5 días por el norte de la región Cajamarca, ha evidenciado la simpatía con la que cuenta la candidata al Congreso de la República por Alianza Para El Progreso, Lili Cruzado.
La ex consejera regional, quien postula con el número 4, visitó las provincias de Jaén, Cutervo, Chota y Hualgayoc, en donde, por la masiva concurrencia, se consolida como una de las candidatas que podría llegar a ocupar una curul.
Lili Cruzado, empresaria cajamarquina, conocida por su labor fiscalizadora durante el segundo gobierno del Movimiento de Afirmación Social, lleva como consigna la frase: “No te fallé como Consejera, no te fallaré como Congresista”, y ciertamente, durante los 4 años que representó a los cajamarquinos en el Consejo Regional de Cajamarca, 127 ex funcionarios fueron denunciados por faltas administrativa y presuntos delitos, los mismos que vienen siendo investigados en diferentes instancias y se prevé que al menos un 70% de los denunciados, tendrán que asumir sus responsabilidades.
Así mismo, la candidata viene planteando 4 propuestas que van desde la reactivación económica de Cajamarca, creando una zona franca en la provincia fronteriza de San Ignacio y la promoción de las inversiones en toda la región, hasta el apoyo a las reformas política y de justicia.
No obstante, la propuesta que más aceptación ha tenido entre la población, especialmente la del campo, es la de otorgar ganancias mineras para las comunidades. “Vamos a impulsar la Ley de Participación de las Comunidades en las Utilidades Mineras”, mencionó Cruzado en su visita a la capital de la provincia de Hualgayoc.
Según refiere Lili Cruzado, esta propuesta nace ante el maltrato que las empresas mineras dan a las comunidades en donde se ejecutan los proyectos. “Necesitamos que las empresas mineras cuiden el medio ambiente de manera visible y responsable; que generen trabajo efectivo y real para nuestros pobladores de los lugares donde se desarrollan los proyectos; necesitamos que paguen impuestos justos”, enfatizó la ex consejera, y agregó, “nuestras comunidades, nuestros campesinos y todos los peruanos necesitamos este cambio. Una de las salidas que proponemos es que nuestras comunidades, a través del Estado, sean dueñas de una parte de las acciones de las empresas”.
